Imagina que es domingo, imagina que te has cambiado de barrio, imagina que te diriges hacia el kiosko más cercano a tu nueva vivienda para comprar el periódico, tal y como hacías en tu antiguo barrio, pero te acercas al kiosko y te encuentras con un buen «percal«, los periódicos están arrugados y rotos por más de un sitio, por lo que decides no comprarlo allí y dirigirte todos los días hacia otra tienda que está a dos pasos.
Pues lo mismo va a pasar con nuestras webs y los enlaces, aunque estemos ofreciendo información de calidad a nuestros visitantes, si todos o la mayoría de nuestros enlaces que incorporamos para dar más información están rotos, nuestros lectores van a tener la sensación de que nuestros textos están algo descuidados, que no pueden acceder a toda la información que les facilitamos, y puede que el interés que en un principio tengan se esfume en un instante.